sábado, noviembre 12, 2005

EL EFECTO


Un grado bajo cero, y ésta es la comuna más fría de la ciudad. Si otra persona me viera, sin duda se sorprendería, yo con una polera y mi piel de gallina enfrentando el viento helado, falta un par de kilómetros para llegar a mi destino, no tomaré un taxi, no pediré ayuda, seré una especie de vaquero caminando por un desierto helado, con un destino fijo, con un propósito claro, pero lejano, tan lejano que parece irreal. La mente humana es capaz de almacenar muchas cosas, a veces tiene la virtud de borrar el horror, pero su capacidad aniquiladora es limitada, y el horror que sobrevive, se alimenta de sí mismo y crece. Y entonces no es posible dejar de oler la mierda presente en todas partes, primero parece un juego, luego es un talento, finalmente una pesadilla. Ahí donde otros ven el sol, yo veo gases explotando; donde otros ven cortesía, yo veo mentira; donde otros ven caridad, yo veo miseria. Ver más allá de lo evidente, ver debajo del agua, el experto corre el riesgo de confiar mucho en su don, pero si el agua no es tan profunda, puede estar metiendo la cabeza en el fango, sin saber cómo es el agua sobre el fango. Vemos lo que queremos ver, un grado bajo cero, y ya siento el efecto que buscaba. Logro ver la claridad del agua, incluso ya ni siquiera pienso en el agua. Ahora sólo siento frío. No siento nada más que frío. Sólo puedo pensar en éste frío tirano y absoluto. Encontré lo que buscaba.

1 Comments:

Blogger Lo de Verdad DIJO...

Narrador.. un privilegio ser la primera. Tus letras me dieron escalofrio. Considero que tener esa capacidad te da una amplitud de criterio enorme. y aunque no lo quieras reconocer, te da la posibilidad de ser cada dia, mejor ser humano. Un abrazo (yo camino en polera y en piel de gallina a diario en este otonio... es un desafio solo tener frio)

5:47 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home